Tuesday, February 19, 2008

La MEZQUITA DE CÓRDOBA fue una BASÍLICA CRISTIANA ocupada

'EL PAÍS' se 'OLVIDA' de que la MEZQUITA DE CÓRDOBA fue una BASÍLICA CRISTIANA ocupada

Planta Mezquita de CordobaEl escritor se ha "olvidado" de añadir desde cuándo hubo una mezquita en ese lugar y que ésta se construyó en una basílica cristiana construida bajo la monarquía visigoda y ocupada por los invasores musulmanes. Claro que entonces el resto de su argumentación se habría hundido.

'El País' quiere conocer todo lo que ocurrió en el franquismo y ahí acaba su afán histórico. En un editorial publicado la pasada semana, el periódico progresista mutilaba la historia y se olvidaba de que la mezquita se construyó en un templo arrebatado por los invasores a los cristianos.

La verdad, no resulta creíble que un redactor de 'El País' escriba un editorial sin consultar datos en el espléndido servicio de documentación del periódico progresista. Por tanto, no parece casual la omisión del hecho de que la mezquita de Córdoba se construyó sobre una basílica cristiana consagrada a San Vicente.

En un editorial titulado de manera reveladora 'Mezquita', el periódico propiedad del enfermo Jesús Polanco insta a la Conferencia Episcopal y al Obispado de Córdoba a "dialogar" con los escasos mahometanos españoles que solicitan que se les ceda parte del templo para sus oraciones. Quien está a la cabeza de este movimiento es el ex comunista Mansur Escudero, a quien el periódico progresista apoyó descaradamente para que se mantuviera el frente de la Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas (FEERI) frente a sus rivales, a los que identifica con el islamismo radical.

El periódico afirma que el uso común del templo cristiano con restos arquitectónicos de la época musulmana es decisión exclusiva de la Iglesia, pero concluye con la afirmación de que "la tranquilidad civil, que en algunos casos se está viendo alterada mediante invocaciones a la religión, o la politización de este tipo de problemas para sustentar actitudes xenófobas, afecta a todos los ciudadanos". ¿Una advertencia a los obispos de que si no ceden el periódico "aconsejará" al Gobierno nacional o a la Junta autonómica socialistas que expropien por el "interés público" la catedral?

En el párrafo anterior, el autor desconocido del editorial –quizás el propio director Javier Moreno- está escrita la siguiente frase: "El templo, que fue mezquita hasta el siglo XIII y catedral desde el XVI, es uno de los edificios más representativos de la historia de España por cuanto expresa la importancia que adquirió el islam en la península, y forma parte de los bienes que la Unesco ha declarado Patrimonio de la Humanidad".

Cordoba MosqueEl escritor se ha "olvidado" de añadir desde cuándo hubo una mezquita en ese lugar y que ésta se construyó en una basílica cristiana construida bajo la monarquía visigoda y ocupada por los invasores musulmanes. Claro que entonces el resto de su argumentación se habría hundido.

No es aventurado deducir de este editorial y de otros textos publicados que el diario progresista y sus directivos, como Juan Luis Cebrián, respaldan completamente la Alianza de Civilizaciones y participan en la invención de una leyenda rosa sobre la religión fundada por Mahoma.

Durante el ataque musulmán a los dibujantes daneses que habían caricaturizado a Mahoma, 'El país' no sólo no publicó ninguna de las viñetas, sino que escribió un editorial titulado 'Cuidado con la sátira' en el que llamaba a pensar las críticas, bromas y opiniones occidentales sobre el islam y sus mitos.

Autor: solidaridad.net- Fecha: 2007-01-23

1 comment:

esteban said...

Los árabes y España
Viaje imaginario y un deseo de hacerlo realidad
He llegado en tren. Son las seis de la mañana. Con mi morral en mi espalda he caminado por las calles y callejuelas. Estoy en Córdoba, ciudad que había soñado conocer. Estoy frente a la mezquita. Tantas historias pasadas que se pueden contar. Lugar bello por su arquitectura, sus formas, sus arcos, sus pilares, sus mosaicos y sus colores. Este lugar que ha pasado a ser recinto de lo sagrado bien musulmán, como también cristiano y, hoy, testimonio de la historia. Hay diferentes influencias en su construcción.
Pero acerquémonos a recordar un poco esa época. Es el año 711, en estas tierras dónde antes habían vivido, amado, mezclado, trabajado, peleado y estado: romanos, fenicios, visigodos, cartagineses, vikingos, judíos, celtiberos y mucho otros pueblos. Llegan los árabes, y los beréberes para quedarse ocho siglos. La ciudad la atraviesan las aguas del río Guadalquivir. Urbe de universidades, escuelas y bibliotecas que dieron un gran desarrollo en lo cultural: artistas, filósofos, científicos poetas, literatos… ciudad crisol de pueblos, paradigma de la tolerancia y convivencias entre pueblos y religiones; donde se desarrollaron grandes intercambios con otros conceptos y filosofías, vanguardias del saber. Sin embargo, hubo, por momentos, conflictos entre las diferentes religiones y pueblos.
Montados en sus caballos los árabes y sobre todos berberiscos… pueblos del norte de África, los cuales, durante años fueron llegando y aportando con ellos toda una gran erudición que traían desde la lejana China, de Grecia, de Egipto, de Persia y de grandes civilizaciones pasadas y que contribuyeron con los conocimientos en: agricultura, arquitectura, literatura, filosofía, química, matemáticas, geometría, como también, aportaron diferentes frutas y legumbres procedentes de la India y del lejano oriente como: la naranja, limón, cebolla, mandarina, cilantro, albaricoque, y muchas otras, las cuales, se adaptaron a la península Ibérica y, años después, fueron transportadas por los conquistadores a América .
Del mismo modo: las especias, entre ellas, la pimienta traídas desde muy lejos, como también, el gusano de seda, las abejas y otros animales domésticos, la pólvora, la tinta, el papel, y la brújula invenciones chinas, éstas últimas; importantes en el desarrollo de Europa por los viajes y el aprendizajes a una vida de conocimientos, lujo y de gran exquisitez, y el desarrollo de la navegación que les permitió ir cada vez más lejos.
Algunas palabras árabes, llegaron para quedarse y enriquecer el español con nuevo léxicos: alcalde, albaricoque, albañil, alacrán, ajedrez, almohada, alcoba, ojalá, arroz, espinaca, alcohol, talco, sofá, garrafa, naranja, ajonjolí, azúcar y muchas otras más.
Los números romanos fueron perdiendo su vigencia y utilidad, ya que los musulmanes habían aportado los números árabes, que por cierto, no son árabes, sino de la India. En esa época ese cambio de números romanos a números arábigos, creó grandes polémicas, y pasaron algunos años antes de adaptarse al cambio e imponerse hasta el día de hoy. ¿Qué complicado sería hacer un número telefónico en números romanos? pero ya eso es, historia del pasado.
Averroes, Maimonides y muchos otros filósofos y científicos aportaron grandes conocimientos en la medicina y, en la filosofía. Platón, Aristóteles, y otros sabios de la antigüedad fueron traducidos del griego al árabe y más tarde al español. Córdoba fue una ciudad donde las culturas judía, cristiana y musulmana se enriquecieron mutuamente. En el cual, judíos y árabes trabajaron juntos para el saber y el conocimiento. Para el Islam, el conocimiento era el camino de encontrar a Alá, (en árabe Allah) y la mezquita con sus arabescos era la vía de llegar a él. Todos estos pensamientos y conceptos, sirvieron para el avance del mundo occidental
Los conflictos entre el Medio Oriente como centro, como lo fueron el Califato de Bagdad y el Califato de Córdoba, en la Península Ibérica cada día se hizo más agudo: la reconquista expulsó a los musulmanes y el dominio de los Reyes Católicos Fernando e Isabel tomaron el control. El descubrimiento del nuevo mundo en 1492, y la expulsión de los árabes y judíos en el mismo año, produjeron cambios en la Europa de la época.
Hoy me paseo por sus calles, mañana me pasearé por la ciudad de Granada y visitaré L’alhambra y caminaré por sus jardines; quiero pararme en el lugar donde el sultán Boabdil, llorando y triste porque tenía que abandonar la ciudad, su madre Fátima, le dijo: “Lloras como una mujer, lo que no supiste defender como un hombre”. Mientras tanto el sultán de Estambul, (Turquía) sorprendido por tanta sabiduría, e ideas modernas para la época; aportado con la llegada de tantas personas expulsadas procedentes de España, y enriqueciendo con ésta emigración al imperio: Los Otomanos.
Las calles angostas, las casas blancas, sus jardines con sus fuentes, su música, sus costumbres, sus pisos de mosaicos plenos de arabescos, y de gran colorido. Cansado de pasear, llego al hotel. Abro la puerta de la habitación e inmediatamente voy a ducharme, siento el agua fresca sobre mi cuerpo, y recuerdo la importancia del agua en hombres que una vez vivieron acá, eran los hombres del desierto. Ellos construyeron jardines plenos de flores multicolores, tanques con agua, era la representación del paraíso en la tierra. Me dirijo al comedor, pido el menú y encuentro como está presente la cultura árabe en las comidas, me apetece una sopa de gazpacho y pido un vaso con vino; luego, voy a mi cuarto, mañana tomaré el tren para irme a Granada y me quedo meditando, todo lo que el mundo Occidental debe a la cultura islámica... y me quedé dormido profundamente… cómo he disfrutado ese viaje en lo imaginario paseándome por ocho siglos de historia.
Esteban Castillo
Estebancastil26@hotmail.com